Contra envidias y mal de ojo. Eleva la autoestima, otorga independencia y fortalece la voluntad. El rodillo facial ayuda a aclarar, reafirmar y calmar la piel para proporcionarle un brillo joven y radiante además de dar un efecto tensor a través de un drenaje linfático suave y relajante, la piel se desintoxica y revitaliza.